Cuaderno de ruta
Ruta 66 en moto | Ruta 66 Agosto 2017 | Día 4 | Laughlin-Williams
Comenzamos el cuarto día de blog de un viaje por la Ruta 66 en moto. El sol sale a las 6 de la mañana, hemos quedado a las 7 para salir y aprovechar el día, tenemos visitas interesantes en la Ruta 66, hoy notaremos como se agradece el retomar el tema de la ruta después del desvío de Las Vegas.
La primera visita es a 50 km, Oatman, el antiguo pueblo minero de finales de 1800. Se conserva con los mismos edificios de madera original. Parece que te trasladas en el tiempo. Por el pueblo pasean muy chulos burros salvajes. Están acostumbrados a ver gente, y recibir alguna que otra chuchería. Sin cortarse, pasean a tu lado sin miedo.
El bar del hotel Oatman es impresionante, paredes y techos están forrados de miles de dólares que los clientes han ido dejando con sus firmas y mensajes.
La carretera es preciosa, curvas lentas, paisajes de película. Una gozada curvear nuestras motos por este paraje que sube hasta Sitgreaves Pass hasta Cool Springs.
Cools Springs, una parada necesaria para asimilar lo que vemos. Esta curiosa gasolinera clásica merece unas fotos.
Sigue la ruta hasta Kingman, allí reposa la orgullosa locomotora Santa Fe después de recorrer miles de millas de EEUU. Llama la atención su enorme tamaño, y no se pude evitar pensar como sería ser maquinista de semejante máquina.
Es temprano, pero decidimos meternos un buen desayuno. Así no tendremos que parar a comer mas tarde, que siempre es una pérdida de tiempo y hace pesada la ruta posterior.
También le damos de comer a nuestras compañeras de viaje.
Sigue la ruta, hoy tenemos muchas visitas, y esta es indescriptible. Es difícil de decir que es, es una combinación de parafernalia vintage con temática Route 66.
Y Seligman, un pueblo especial, morada de Angel Delgadillo. Uno de los impulsores del renacimiento de la Ruta 66 después de su depresión.
Y llegamos al precioso Williams, un pueblo especial, con encanto. Es la puerta de entrada al Gran Cañón. Por aquí pasan miles de viajeros con destino a esa maravilla natural tan especial.
Hemos paseado por el pueblo, nos hemos relajado, hemos cenado de maravilla. Mañana, tendremos la visita especial del Gran Cañón.
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